Quiste epidermoide del cuarto ventrículo
Talacchi y col., describen cinco pacientes (18 %) en una serie de 28 casos de quistes epidermoides de la fosa posterior recolectados en 20 años 1)
Tancredi y col., informan nueve durante un periodo de 25 años, aproximadamente 9 % de todos los casos de quiste epidermoide 2).
Nassar y col., identificaron cuatro durante 35 años (16.7 %) 3).
En la tomografía computarizada de cráneo, el quiste se observa iso o hipodenso; las calcificaciones son raras y generalmente no realzan con el contraste.
La resonancia magnética es el estudio de elección y en ella el quiste se comporta iso o hipointenso en T1
Hiperintenso en T2
En secuencias FLAIR, el tumor se hace muy evidente
En las imágenes ponderadas en densidad protónica suelen verse más intensos que el líquido cefalorraquídeo
El cuarto ventrículo atrapado y el quiste racemoso de cisticerco son los diagnósticos diferenciales más frecuentes.
El tratamiento consiste en la exéresis quirúrgica 4).
Caso clínico
Mujer de 40 años sin antecedentes de interés que presentó cuadro sincopal con crisis comicial.
Sin focalidad neurologica.
RM cerebral: Lesion frontal compatible con meningioma y quiste epidermoide del IV ventriculo.
En posición de decúbito lateral se aborda por vía suboccipital y telovelar.