Neurocirujano y responsable de la Unidad de Neurocirugía Pediátrica del Virgen de las Nieves

La cirugía de la epilepsia es una intervención compleja “en la que hay que estudiar primero el cerebro con electrodos para investigar el foco de la epilepsia. Después se trata de eliminar o desconectar la zona que crea las crisis”, explicó el neurocirujano.

Por ahora, aunque no se consigue curación, los resultados de la cirugía en esta enfermedad son buenos ya que “mejora la calidad de vida” de los menores, que vienen a Granada de toda España a estudiar su posible indicación quirúrgica.

“Si la epilepsia está ocasionada por una lesión focal se elimina y se puede librar de las crisis que produce y los fármacos, pero en el caso de las epilepsias más complejas se trata de controlar las crisis, que alteran significativamente la calidad de vida de los menores. En estos casos con la cirugía y uno o dos medicamentos se subyugan las crisis”, aseguró Saura, quien indicó que hasta ahora todas las cirugías que se han realizado en niños con epilepsia han sido en “menores de siete u ocho años porque se trata de epilepsias de nacimiento, genéticas, que ya durante la lactancia se descontrolan y causan muchas crisis”.

La unidad infantil está coordinada por el director de la Unidad de Cirugía de la Epilepsia del hospital (la única de Andalucía y de las pocas de España), el doctor Olivares Granados, que interviene junto con Saura los casos infantiles que llegan al hospital.

La unidad general (para adultos y niños) cuenta con un equipo multidisciplinario formado por neurólogos, neuropediatras, neurocirujanos, neurofisiólogos, neuropsicólogos, neurorradiólogos y especialistas en Medicina Nuclear, específicamente entrenados en evaluación prequirúrgica y cirugía de la epilepsia. Este equipo está apoyado por técnicos y enfermeros entrenados en programas de cirugía de la epilepsia y cuenta con la ayuda de una unidad de neuropatología específica. Entre los medios disponibles, junto a los propios de quirófano, se encuentran la resonancia magnética craneal de alta resolución, técnicas de monitorización neurofisiológica intraoperatoria, videoEEG con posibilidad de registro de electrodos de foramen oval, subdurales y profundos, PET y SPECT cerebral y angiografía cerebral ¹⁾.