El absceso intramedular es una patología poco frecuente.

Cuando se presenta de forma aguda, puede debutar con clínica de dolor de espalda y fiebre. Por el contrario, el absceso intramedular crónico, suele mostrar sintomatología poco específica que dificulta su diferenciación de otras lesiones intramedulares.

El absceso intramedular suele originarse por un foco de infección a distancia. Otras veces, es de causa iatrogénica, por ejemplo tras punción lumbar.

Si se sospecha un absceso intramedular o subdural, es importante la realización de una exploración inmediata mediante RM.

Si esta exploración confirma o no descarta la sospecha clínica, se debe realizar drenaje quirúrgico y tratamiento antibiótico adecuados, debido a que si se deja a su evolución espontánea, el pronóstico es desfavorable.